Reiteran
espiritistas cubanos su vocación unitaria
La vocación unitaria de los espiritistas
cubanos, y la decisión de seguir demostrándola en la práctica, fueron
reiteradas este 15 de noviembre del 2015, por centenares de seguidores de la
doctrina reunidos en la comunidad rural de Monte Oscuro, que pertenece al
municipio de Bayamo, en la oriental provincia de Granma.
Hombres y mujeres, gran cantidad de ellos
jóvenes, se juntaron nuevamente en ese lugar para rendir homenaje al
prestigioso líder espiritista Salustiano Olivera Sánchez, quien nació el 16 de
noviembre de 1869 y desencarnó en igual fecha de 1950.
En medio de la masiva y habitual sesión
mediúmnica de la sociedad Buscando Luz y Verdad, que está festejando 105 años
de existencia, fueron presentados Ciro Labrada Estrada y Julio Mesa Estévez,
presidentes de las federaciones espiritistas de las provincias de Granma y
Camagüey, respectivamente.
Ambos recordaron la larga historia de unidad
escrita por los maestros de dicha doctrina en la mayor de las Antillas, y
recalcaron la decisión de las actuales generaciones para continuar extendiendo
ese credo del amor, la justicia y la caridad.
Con evidente alegría, los presentes
recibieron la noticia de que ya Cuba cuenta con cinco federaciones provinciales
reconocidas en el Registro de Asociaciones del Ministerio de Justicia, porque
junto a las mencionadas están La Habana, Holguín y Las Tunas.
Labrada y Mesa calificaron de invariable la
vocación patriótica de los espiritistas en la Isla, y pusieron como ejemplo a
Olivera Sánchez, quien formó parte de las tropas independentistas en la llamada
Guerra Necesaria (1895-1898), cuyo organizador fue José Martí, el más grande
pensador cubano de todos los tiempos.
La tradicional y emotiva gala artística
junto al mausoleo que guarda los restos de Olivera Sánchez, incluyó décimas que
también resaltaron las raíces unitarias, patrióticas y científicas del
Espiritismo en Cuba.
Esas poesías fueron cantadas por Iraida
Ramos, de la sociedad Más Luz, en la ciudad de Bayamo, y Juana Pérez, de
Buscando Luz y Verdad.
La adolescente bayamesa Claudia González
interpretó con su violín las cubanísimas piezas El Mambí y La Bayamesa, y
Joaquín Moré, de Florida, en Camagüey, vocalizó Cuba, qué linda es Cuba.
En la concentración participaron
espiritistas Holguín, Las Tunas, Camagüey
y Granma, entre estos últimos algunos ancianos que trabajaron en Monte
Oscuro junto a Olivera Sánchez.
Reconocido entre los grandes espiritistas de todos los
tiempos en Cuba, el homenajeado fue un médium con dotes singulares, y los seguidores
ven en su obra una confirmación más del Espiritismo como vía para el
mejoramiento moral y el avance constante hacia la verdad.
Según la
tradición oral, entre los múltiples aportes de aquel mambí sobresalió la
frecuente curación de personas afectadas por desequilibrios mentales, lo cual
lo obligó a construir varias viviendas para quienes debían permanecer en Monte
Oscuro durante largas temporadas. (Martín A. Corona Jerez)
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